Estados Unidos no termina de recuperarse tras la crisis del parón global de la industria de la aviación por la pandemia que obligó a recorte de personal en las aerolíneas que dejó al arranque de la temporada de verano y el puente del fin de semana largo por el Memorial Day, más de 4.000 vuelos cancelados, a lo que hay que sumar también el mal clima, que por ejemplo ha afectado a Florida este fin de semana con la entrada de la tormenta Alex.
Delta Air Lines fue la que más cancelaciones sufrió entre las aerolíneas estadounidenses, con más de 240 vuelos, o el 9% de sus operaciones. El aeropuerto internacional Hartsfield-Jackson de Atlanta, donde Delta tiene su sede y su mayor centro de operaciones, se vio muy afectado por los retrasos en los viajes.
El mal tiempo en varias zonas del país, unido a la falta de personal en algunos aeropuertos y aerolíneas, se consideran como el principal motivo del alto número de vuelos cancelados.
Por su parte, la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) avisó que muchos de los mayores aeropuertos del país estaban sufriendo limitaciones en despegues y aterrizajes por esa carencia de personal y los altos volúmenes de tráfico.
La situación se da a pesar de que varias líneas aéreas ya habían reducido vuelos de cara al verano, precisamente para evitar dificultades al no contar con empleados suficientes para garantizar sus frecuencias habituales.
Delta señaló que las cancelaciones se debieron al mal tiempo y a «acciones de control del tráfico aéreo”, al señalar que está tratando de cancelar vuelos con al menos 24 horas de antelación.
Muchos pronósticos suponen que el número de viajeros igualará o incluso superará los niveles de los viejos tiempos prepandémicos. Sin embargo, las aerolíneas tienen miles de empleados menos que en 2019, y eso ha contribuido en ocasiones a la cancelación generalizada de vuelos.
En cuanto al clima, este fin de semana pasado, la tormenta tropical Alex avanzaba hacia Florida, por lo que algunas aerolíneas ya han comenzado a cancelar vuelos, confirmó un portavoz del Aeropuerto Internacional de Miami.