La adjudicación de los contratos de handling de AENA, que dejó fuera a Iberia Airport Services en ocho grandes aeropuertos, ha puesto en pie de guerra a los sindicatos de la división de handling de la aerolínea. La decisión de la mesa de contratación de AENA deja en el aire a 3.000 empleados de Iberia, pendientes de la subrogación y entrada en empresas como Menzies, Aviapartners y Groundforce (Air Europa) ganadoras de un concurso que repartía 5.000 millones en ingresos en los próximos siete años

Los representantes sindicales de Iberia Airport Services en Madrid-Barajas, con miembros de UGT, CC OO, GGT, USO, CTA y CESHA, llaman a los 8.000 trabajadores de la división de handling de Iberia a una guerra con Aena: “Tenemos que conseguir que el proceso se paralice y AENA analice las consecuencias de apostar por empresas que, a nuestro juicio, no cumplen los convenios colectivos en su totalidad”, se puede leer en el acta de la reunión del comité de Iberia en Barajas celebrada en la tarde del martes pasado.

Desde los sindicatos se expone que Iberia Airport Services ofrece las mejores condiciones laborales del sector y, de no poder frenarse el proceso, van a velar por el mantenimiento de los derechos de los trabajadores y el cumplimiento del convenio. De hecho, CC OO se queja de que están en trámite denuncias contra las nuevas empresas adjudicatarias por no respetar las condiciones laborales en los últimos años.

UGT por su parte declaró que “no dudará en impugnar” los resultados del concurso si las pujas ganadoras “pueden resultar perjudiciales en lo social para los trabajadores o no son correctas”.

Al respecto, fuentes de Aena explican que el pliego vela por el cumplimiento del convenio sectorial, pero UGT lamenta que la parte social solo representara un 10% de la puntuación técnica.

Iberia manifestó “perplejidad” a los escasos minutos de conocer las puntuaciones de un proceso en el que se veía como clara favorita. También exigió examinar con AENA los resultados del concurso, trabajo que comenzó el pasado día 13 en la sede del gestor aeroportuario.

AENA defiende la limpieza y transparencia del concurso, para el que hubo dos rondas de contactos con las empresas y sindicatos antes de lanzar la licitación.