El Grupo LATAM anunció el incremento de la oferta de asientos en algunas rutas como respuesta a una incipiente recuperación de la demanda, especialmente en el segmento corporativo o de negocios en Chile.
De esta forma, la aerolínea incrementará en un 5% la capacidad (medido en asientos por kilómetro ofrecidos – ASK) de los vuelos desde y hacia Iquique, Antofagasta, Calama, Copiapó y Concepción; todos saliendo desde Santiago.
Andreas Schek, vicepresidente de Ventas de LATAM Airlines Group, comentó al respecto “Este aumento de capacidad es un indicador de una recuperación paulatina del segmento corporativo, donde cada vez más el viajero de negocios necesita reconectar presencialmente con sus clientes y proveedores, además del interés en el programa de compensación de huella de carbono “Vuela Neutral”, donde LATAM duplica la compensación de las empresas en un esquema 1+1”.
Este anuncio se da a los pocos días del anuncio de la creación del Grupo Abra que integrará principalmente Avianca Holdings y Gol Linhas Aereas, por lo que pareciera ser el comienzo de la estrategia de respuesta por parte de LATAM.
Si bien, no es posible comparar el anuncio de LATAM con la creación del Grupo Abra, si parece ser un primer paso atacando un segmento que cada vez está más desatendido por Avianca: el corporativo.
No es un secreto que la implementación de la nueva configuración a bordo de la familia A320 de Avianca no ha sido un “encanto” para los habituales clientes de la aerolínea ya que sacrifica en gran medida el confort. Razón por la cual, el segmento ejecutivo se ha convertido en un nicho en busca de oferta en Latinoamérica.
Si bien, al momento el incremento corresponder para rutas seleccionadas en Chile, mercado que está en pleno proceso de recuperación, se puede ver cómo el comienzo de una nueva estrategia comercial que busca atender dicho segmento.
Cabe recordar que, actualmente LATAM para salir de bancarrota planea recaudar alrededor de US$5.000 millones mediante la emisión de bonos convertibles y acciones para sus acreedores, así como un pago en efectivo de más de US$700 millones a cambio de una promesa de inversión de dinero nuevo. Motivo por el cual es muy factible que en los próximos meses se anuncien nuevas estrategias respaldadas en este nuevo presupuesto.
Pese a este anuncio, LATAM mantiene su previsión de un cauto optimismo, esperando que las operaciones de pasajeros y la demanda sigan mejorando progresivamente, pero sin perder de vista los riesgos que genera el entorno externo y el escenario mundial.