México es uno de los mercados aéreos más fuertes y competitivos de la región, la cantidad de operadores aéreos que vuelan en el país sumado a la alta demanda de viajes hacen de este uno de los de mayor oportunidad. Sin embargo, existen factores que hacen peligrar esta realidad.
Según un estudio realizado por la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA) y Amadeus, aunque la industria aérea de México sobresale entre las más competitivas de la región gracias a su alto nivel de conectividad, su política de transporte aéreo durante la pandemia y por el número de países a los que puede acceder un ciudadano mexicano sin necesidad de visa, actualmente existe un riesgo de perder esta posición relevante.
Es así como el factor de combustible poco competitivo, sin mencionar la volatilidad mundial en los precios de este, sumado a que México es el cuarto país menos competitivo de la región respecto a las tasas aeroportuarias hacen peligrar la fortaleza de este mercado.
Actualmente México posee dos de los aeropuertos más caros de la región: Ciudad de México y Monterrey en donde la tasa promedio es de US$ 61.70.
Según ALTA, de acuerdo con datos de 2022, en México cuando un pasajero paga un tiquete de 100 USD, un 45% corresponde a impuestos, tasas y contribuciones. En un tiquete de 50 USD, el gravamen llega a 61%. En promedio podríamos decir que dobla el precio del tiquete, encareciendo sustancialmente la posibilidad de volar.
Así mismo, según José Ricardo Botelho, director ejecutivo y CEO de ALTA, la discusión de permitir el cabotaje es otro factor que impacta negativamente la competitividad dado a que se trata de un aspecto técnico que afecta la conectividad aérea, la seguridad, entre otros aspectos. Por esta razón es importante crear mejores prácticas que favorezcan al sector de la aviación.
Sumado a lo anterior, cabe destacar el contexto macroeconómico que ha impactado a la aviación mundial: la inflación y recesión en algunos mercados, así como el incremento en los combustibles. Sin mencionar que las aerolíneas en este mercado reciben ingresos en su moneda local pero un gran porcentaje de sus gastos se hacen en dólares, una balanza dispareja.
Por estos factores, ALTA ha puesto a disposición de las autoridades su conocimiento y capacidad para diseñar e implementar prácticas que impacten positivamente al mercado y aseguren su competitividad.