La presidenta del Comité de Comercio del Senado, Maria Cantwell, presentó una propuesta que otorgaría excepciones para las dos variantes de MAX si incluyen mejoras de seguridad «como un ángulo de ataque mejorado (AOA) y un medio para desactivar las advertencias de entrada en pérdida y las alertas de exceso de velocidad para todas las aeronaves MAX».
El documento, el cual fue revisado por Reuters, propone que Boeing tendría que asumir los costos de la modernización obligatoria de mejoras de seguridad para los aviones MAX que actualmente están en servicio.
Esta propuesta significa una luz de esperanza para el fabricante que en las últimas semanas ha buscado una extensión del Congreso para la certificación de sus nuevas versiones 737 MAX -7 y 737 MAX-10.
Cabe destacar que estas certificaciones se dan tras los dos accidentes fatales del 737MAX en Indonesia y Etiopía, que significaron la puesta en tierra de todas las aeronaves de este tipo.
«Queremos impulsar mejoras en la seguridad y veremos qué sucede. Algunas personas solo quieren una extensión directa… La seguridad debe ser el enfoque, no una fecha, la seguridad», comentó Cantwell a Reuters.
Al momento y de no darse la extensión, todos los aviones MAX deben tener a partir del próximo 27 de diciembre sistemas de alerta de cabina modernos para ser certificados por la FAA. Este requisito significaría retrasos importantes para el despliegue de los nuevos aviones MAX, razón por la cual Boeing necesita de la extensión.
De esta manera, se abre un camino para que Boeing consiga la extensión que busca y así continuar con sus planes comerciales de la aeronave. Sin embargo, cabe destacar que la propuesta de Cantwell requeriría una mejora adicional, así como de sesiones informativas periódicas al Congreso por parte de la FAA sobre el estado del MAX