Boeing fija la fecha de finalización de la producción del F/A-18 mientras el negocio de Defensa se orienta hacia futuros trabajos.
«Boeing espera finalizar la producción de nuevos aviones de combate F/A-18 Super Hornet a finales de 2025, tras la entrega de los últimos cazas de la Armada estadounidense. La producción podría ampliarse hasta 2027 si el Super Hornet es seleccionado por un cliente internacional» anunció el fabricante estadounidense en un comunicado.
Para satisfacer la demanda de productos y servicios de defensa, Boeing tiene previsto seguir contratando personal año tras año durante los próximos cinco en su planta de St. Louis. El año pasado se contrató a más de 900 personas en la región.
«Estamos planificando nuestro futuro, y la construcción de aviones de combate está en nuestro ADN», dijo Steve Nordlund, vicepresidente de Boeing Air Dominance y responsable de la planta de St. Louis. «A medida que invertimos y desarrollamos la próxima era de capacidad, estamos aplicando la misma innovación y experiencia que hicieron del F/A-18 un caballo de batalla para la Armada de EE.UU. y las fuerzas aéreas de todo el mundo durante casi 40 años.»
La estrategia de Boeing
Redirigir recursos a futuros programas de aviones militares, para apoyar el trabajo en la próxima generación de aviones avanzados con y sin tripulación. Para esto, Boeing planea construir tres nuevas instalaciones de última generación en St. Louis. Estas instalaciones, así como el nuevo Centro de Fabricación de Composites Avanzados de Arizona y la nueva planta de producción del MQ-25 en el aeropuerto MidAmerica de St. Louis, representan una inversión de más de 1.000 millones de dólares.
«Boeing ha invertido 700 millones de dólares en la mejora de las infraestructuras de St. Louis durante la última década, lo que ha permitido la introducción de nuevas técnicas de diseño y construcción que agilizan los procesos y mejoran la calidad a la primera» indica la compañía y añade «Aumentar la producción de nuevos programas de defensa críticos: Louis aumentará la producción del primer sistema de entrenamiento totalmente digital del mundo, el T-7A Red Hawk, y del primer avión de reabastecimiento autónomo desplegado en portaaviones, el MQ-25 Stingray, junto con la producción en curso de los nuevos F-15EX Eagle II y los componentes del ala del 777X».
Boeing adelantó que seguirá desarrollando capacidades avanzadas y actualizaciones para la flota mundial de F/A-18 Super Hornet y EA-18G Growler. A lo largo de la próxima década, todos los Super Hornet Block II en fase de modificación de vida útil recibirán el conjunto de capacidades Block III. La compañía también seguirá añadiendo capacidad de ataque electrónico avanzado como parte de las modificaciones en curso de los Growler.
Desde el debut del F/A-18 en 1983, Boeing ha entregado más de 2.000 Hornets, Super Hornets y EA-18G Growlers a clientes de todo el mundo, entre los que se incluyen la Marina de los EE.UU., Australia, Canadá, Finlandia, Kuwait, Malasia, España y Suiza.