Una nueva unidad de Marines retira sus Harrier para prepararse a recibir el F-35, en este caso el F-35C.
En la primavera de 2022, el escuadrón VMA-311 se reactivará como el Escuadrón de Ataque de Cazas 311, operando el F-35C Lightning II en la Base Aérea de Miramar del Cuerpo de Marines de Estados Unidos. De manera similar, el VMA-214 comenzará a volar el F-35B como VMFA-214 en la Base del Cuerpo de Marines en Yuma.
Por este motivo, se realizó una ceremonia el pasado 15 de Octubre en la Base de Yuma del Cuerpo de Marines.
Larga tradición
En 1942, los VMA-311 Tomcats se encargaron inicialmente como un escuadrón de ataque de combate en Cherry Point, Carolina del Norte.
Los Tomcats se desplegaron durante la Segunda Guerra Mundial y volaron la primera misión de combate de aviones a reacción de la Marina norteamericana en 1950 durante el Conflicto de Corea.
El VMA-311 fue nombrado Escuadrón de Ataque del Año de la Asociación de Aviadores del Cuerpo de Marines en 1988 y 1991, y se convirtió en el primer escuadrón de marines en emplear el AV-8B Harrier en combate durante la Operación Escudo del Desierto.
Los Harriers del VMA-311 fueron los primeros en volar misiones de combate en Afganistán durante la Operación Libertad Duradera y participaron en la primera salida de combate de la Operación Libertad Iraquí en 2003.
Si bien el VMA-311 se enorgullece de haber empleado al Harrier en apoyo de numerosos conflictos militares, la transición del Cuerpo de Marines al F-35 marca uno de los muchos avances que está tomando el Cuerpo de Marines para mantener la superioridad aérea.
Aunque el F-35B y el AV-8B ofrecen capacidades de despegue y elevación vertical, el F-35 ofrece mayor versatilidad, letalidad y reducción de la fatiga del piloto. El F-35 representa el futuro de la aviación táctica del Cuerpo de Infantería de Marina y brindará agilidad estratégica, flexibilidad operativa y supremacía táctica a la Fuerza.