El 6 de enero, las Fuerzas Aéreas del Reino Unido (RAF) y Francia volaron en una misión combinada en la que participaron dos aviones cisterna «Voyager» de la RAF que escoltaban y reabastecían, en ruta a África, a cuatro cazas Mirage 2000 franceses del Armee de l’air .
La misión de proyección de largo alcance a Djibouti fue una demostración real de la capacidad del Componente Aéreo de la Fuerza Expedicionaria Conjunta Combinada (CJEF).
Los cisterna Voyager con base en RAF Brize Norton en Oxfordshire proporcionaron reabastecimiento aire-aire para los cazas franceses durante su viaje de más de 6.000 km al noreste de África, para participar en su Ejercicio «Shaheen»
La CJEF es una fuerza militar franco-británica que se creó tras la firma de los Tratados de Lancaster House por el presidente Sarkozy y el primer ministro Cameron en 2010. Fue ratificada por el presidente Macron y la primera ministra May en 2018. La CJEF declaró recientemente su Capacidad Operativa Completa y esta misión fue una demostración oportuna de la cooperación regular entre la RAF y la Fuerza Aérea y Espacial francesa.
«Shaheen»: de Francia a Djibouti
El Comando de Defensa Aérea y Operaciones Aéreas (CDAOA) llevó a cabo un ataque aéreo llamado «Shaheen» desde la Francia metropolitana hasta la base aérea 188 «Coronel Massart» en Djibouti.
Dos Mirage 2000D del 3º Escuadrón de Cazas, dos Mirage 2000-5 del escuadrón «Cigognes» acompañados por dos aviones A330 MRTT británicos llegaron al Cuerno de África donde una oposición aire/aire y aire /tierra simulada los esperaban a su llegada.
Es bajo tres centímetros de nieve que las dos tripulaciones del Mirage 2000 D abandonan su base aérea, antes de encontrar, en algún lugar entre las nubes, a sus homólogos del Base Aérea 116 de Luxeuil para una larga misión.
Para cubrir los 6.000 kilómetros que los separan de su destino, dos MRTT de la Royal Air Force actúan como aviones de reabastecimiento en vuelo para que los cuatro cazas nunca se queden sin combustible. Tras sobrevolar el monte Etna, o el Valle de los Reyes en Egipto, llegarán a Djibouti. Sin embargo, no se trata simplemente de aterrizar en la Base Aérea 188.

Misión «Shaheen»
Misión táctica de alta intensidad
Tras este largo convoy, van a participar en una misión táctica de alta intensidad. Su objetivo es disparar, de forma ficticia, dos misiles de crucero Scalp en un objetivo determinado. El escenario del ejercicio, es una fábrica de armas. Como ayuda en esta tarea, participan dos Rafales, ya preposicionados en la base 188, que se unirán en el despliegue aéreo. El papel de cada uno está bien definido: Los Rafale y los Mirage 2000-5 deben escoltar los Activos de Alto Valor (HVA), es decir, el Mirage 2000D que está equipado con los misiles.
Para lograrlo, deben superar muchos obstáculos. Un comité de bienvenida, poco amistoso, compuesto por dos Rafale y dos Mirage 2000-5, asumen el papel de enemigos encargados de evitar que ingresen al espacio aéreo de Djibouti. Además, los sistemas de defensa Tierra/Aire también los pondrán al límite.
“Tenemos que calcular el punto de caída de nuestros misiles para que sigan una ruta, a baja o gran altura, de modo que eviten estos sistemas que podrían neutralizarlos”, explica el comandante de la misión y añade «Además, debemos disparar nuestros dos Scalps simultáneamente para asegurarnos de que al menos uno de ellos de en el objetivo».
Finalmente, un Airboss, es decir, un oficial que, gracias a una copia de la L16 y los intercambios de radio de los participantes, se encarga de liderar la fase de ejercicio, enriqueciendo o complicando el escenario.
Tras una hora de combate, y a pesar de la agresividad de la fuerza contraria, los Mirage 2000D dieron en el blanco. La incursión, procedente de Francia, puede acabar finalmente con la satisfacción de un trabajo bien hecho.

Misión «Shaheen»