Durante la presentación anual de resultados de Airbus, tuvimos la oportunidad de preguntar a Guillaume Faury por la delicada situación de su división de espacio tras la pérdida del lanzador Vega-C y el retraso del Ariane 6.
“Es muy importante no solo para nosotros, sino para toda Europa y para decenas de compañías europeas que trabajan en el sector de espacio. Somos parte de Ariane, es una joint venture en la que tenemos el 50% y siempre ha sido muy importante para nosotros porque somos fabricantes de satélites y necesitamos acceso al espacio. Usted mencionó el Ariane 5 y el retraso de un año del Ariane 6, pero en este último caso no sólo es eso, es que el backlog es muy largo, los slots del Ariane 6 están vendidos para mucho tiempo, es un éxito comercial, pero ahora tenemos un cuello de botella. No tenemos acceso a los Soyuz rusos y, unido a la pérdida de Vega-C a finales del año pasado, en efecto Europa ha perdido casi toda su capacidad de acceso al espacio”.
Para Faury la solución pasa por reunir de nuevo las iniciativas europeas bajo un mismo proyecto común: “Hemos sido exitosos con el Ariane cuando toda Europa compartía el mismo proyecto como socios y uniendo nuestras fuerzas. Desde entonces la situación ha divergido en muchos proyectos nacionales para el acceso al espacio y eso nos ha dividido y nos ha traído a la situación actual. Creo firmemente, y es lo que estamos transmitiendo a todos los implicados, incluyendo a los países, que necesitamos reconverger de nuevo a un road map europeo para el acceso al espacio. El Ariane 6 es un buen ejemplo de éxito europeo incluso antes de ser lanzado, pero necesitamos ver qué hacer a partir de ahora y cómo; y espero que lo que venga ahora sea, como le decía, un plan europeo conjunto para el acceso al espacio, darle la vuelta a esta crisis con un impulso positivo y volver a tener un proyecto común, que es lo que nos permitió tener éxito en el pasado”.