
Foto: Mathias-Pikelj
Los dos satélites de observación de la Tierra GRACE-FO (GRACE = Gravity Recovery and Climate Experiment, FO = Follow-On), que Airbus desarrolló y construyó en Friedrichshafen para la NASA/JPL, soportaron el ruido durante las recientes pruebas acústicas.
El impacto sonoro que se genera durante el lanzamiento de cohetes se simuló en una cámara de eco con un volumen de unos 1.400 m³ en las instalaciones de IABG en Ottobrunn, cerca de Múnich. Los satélites, colocados en su posición de vuelo, se sometieron a un impacto sonoro de unos 140 decibelios (dB) durante cuatro ciclos de pruebas. A modo de comparación, un martillo neumático produce 100 dB y el umbral del dolor en el hombre es de 130 dB. Ambos satélites pasaron las pruebas con éxito.
El Jet Propulsion Laboratory (JPL) de la NASA, situado en la localidad estadounidense de Pasadena (California), en asociación con el Centro Alemán de Investigación para Geociencias (GFZ, Potsdam) enviará ambos satélites de investigación GRACE-FO a una órbita polar y a una altitud de unos 500 kilómetros, donde operarán guardando entre sí una distancia de 220 kilómetros. Esta misión es una continuación de la misión GRACE que ha desarrollado con éxito sus operaciones desde 2002. Los dos satélites tomarán medidas, de forma continua, muy exactas de su distancia de separación que cambia dependiendo de la gravedad de la Tierra. De esta forma, los científicos podrán cartografiar los campos gravitatorios de nuestro planeta.