La Agencia Espacial Europea (ESA) ha seleccionado a Airbus Defence and Space como contratista principal para la nueva misión LSTM – Land Surface Temperature Monitoring (Monitorización de la temperatura de la superficie terrestre), que será la tercera misión de la ESA en ser liderada por Airbus desde Madrid.
LSTM es parte de Copernicus, el programa de observación de la Tierra de la Unión Europea para la monitorización global. Es una de las seis nuevas misiones, que amplía las capacidades del componente espacial actual de Copernicus. El contrato está valorado en 380 millones de euros que incluye el desarrollo de un satélite LSTM, con opción a dos satélites más.
Primer contrato Copernicus adjudicado a España
LSTM es la primera misión de Copernicus adjudicada a una empresa española y la tercera misión de la ESA en ser liderada por Airbus en Madrid tras la exitosa entrega en órbita de CHEOPS, el cazador de exoplanetas, y SEOSAT-Ingenio. La selección de Airbus España es un hito importante para el sector especial en el país. El consorcio industrial está integrado por más de 45 empresas e instituciones de hasta 18 países diferentes. El apoyo de la delegación española a la ESA fue clave para alcanzar este logro.
Airbus tiene la responsabilidad total sobre LSTM. Diseñará y construirá el satélite LSTM en Madrid, mientras que el desarrollo y producción del instrumento de tecnología avanzada estará a cargo de Airbus en Toulouse. El proyecto contará con la participación de empresas españolas como Sener, Thales Alenia Space, HV Sistemas y Elecnor Deimos.
Satélite LSTM
El objetivo principal de LSTM es proporcionar mediciones de temperatura de la superficie terrestre diurnas y nocturnas de larga duración a nivel mundial. El análisis de los datos de satélites para cartografiar, monitorizar y pronosticar los recursos naturales de la Tierra ayuda a comprender qué, cuándo y dónde se están produciendo cambios. En particular, esta misión responderá a las necesidades de los agricultores europeos de hacer que la producción agrícola en las granjas individuales sea más sostenible, a medida que aumenta la escasez de agua y se producen cambios en el medio ambiente. Los especialistas podrán calcular en tiempo real cuánta agua requieren diferentes plantas en diferentes áreas y con qué frecuencia deben regarse esas plantas.
Las mediciones de la temperatura de la superficie terrestre y la evapotranspiración derivada, el vapor de agua emitido por las plantas a medida que crecen, son parámetros clave para comprender y responder a las variaciones climáticas, administrar los recursos hídricos para la agricultura y predecir sequías. Las observaciones de infrarrojos térmicos darán apoyo a una gama de servicios adicionales para abordar la degradación del terreno, la composición del suelo, los peligros naturales como los incendios y la actividad volcánica, la gestión de las aguas costeras y continentales, así como los problemas de las islas de calor urbanas.
LSTM operará desde una órbita polar terrestre baja, para mapear tanto la temperatura de la superficie terrestre como las tasas de evapotranspiración con un detalle sin precedentes a escala de campo. Podrá identificar las temperaturas de campos individuales y obtener imágenes de la Tierra cada tres días con una resolución de 50 m. Esto es aproximadamente 400 veces más detalle de lo que se adquiere actualmente desde el espacio. Sus observaciones cubrirán un amplio rango de temperaturas, desde aproximadamente -20° C a + 30° C, con muy alta precisión (0,3° C).
El instrumento óptico que vuela en el satélite LSTM aprovecha las últimas innovaciones de Airbus de programas como la misión franco-india TRISHNA para ofrecer el mejor instrumento de su clase. Adquirirá imágenes en infrarrojo muy cercano, infrarrojo de onda corta e infrarrojo térmico. Con una capacidad de revisita de cuatro días, el satélite sobrevolará las latitudes europeas cuando el sol y, en consecuencia, el estrés en los cultivos estén en su punto más alto, para facilitar la medición de la evapotranspiración.