thyssenkrupp Elevator, celebra hoy la finalización de uno de sus mayores proyectos en Oriente Medio: un total de 143 pasarelas de embarque y cuatro ascensores suministradas al nuevo Istambul Grand Airport, en Turquía.
Este nuevo aeropuerto, que ha costado un total de 22,15 mil millones de euros, es la mayor inversión en infraestructuras de Turquía hasta la fecha. Será el aeropuerto más grande del mundo una vez se hayan completado las cuatro fases del mismo, con un despliegue de seis pistas y una capacidad anual de hasta 200 millones de personas.
El inicio de la primera fase se ha hecho hoy oficial, con la presentación de dos pistas y una terminal con capacidad para 90 millones de personas. Conscientes de las necesidades del aeropuerto, tanto las pasarelas de embarque como los ascensores de la empresa asegurarán un constante flujo de gente desde la entrada del aeropuerto hasta el embarque.
Las pasarelas de embarque se desarrollaron y fabricaron de acuerdo con los más altos estándares tecnológicos en la fábrica que la compañía tiene en Mieres, Asturias, y transferidas posteriormente a Estambul, donde comenzó el trabajo de instalación en 2017.
El trabajo de la firma se completó en 27 meses exactos, desde la firma del contrato hasta la finalización del encargo.